Estamos convencidos de que la Gerencia Única de Área supone un modelo de gestión sanitario innovador, que aporta las siguientes ventajas:
- Sistema de gestión integrada de área:
Se diseña un Plan de Acción, referido anteriormente, para la Gerencia, basado en la misión definida por la propia organización (con participación de todos los profesionales a través de encuestas) en el que se despliegan los objetivos estratégicos y se definen los factores clave de éxito, en el Plan
se llega a los objetivos de unidades y centros y se catalogan los procesos, además de definirse los propietarios de los mismos. En el Plan se definen indicadores para el seguimiento de los diferentes objetivos, además de un cuadro de mandos estratégico. Este Plan es posible debido a que se tienen los mismos objetivos, intereses y prioridades del equipo directivo en ambos niveles asistenciales. - Gestión integral por procesos. Mejora de la continuidad:
- Disminución de la variabilidad. Estos aspectos tienen una importante repercusión sobre el usuario, ya que si existe continuidad en los cuidados, el usuario percibe una mayor coherencia y calidad en su atención. La disminución de la variabilidad implica un incremento de la equidad, de modo que ante situaciones clínicas similares la respuesta de la organización ante la demanda del usuario será igual. Para ello, la implantación de rutas asistenciales y vías clínicas basa- das en la mejor evidencia son una herramienta útil. De igual manera, la definición y puesta en marcha de procesos no asistenciales correctamente diseñados, documentados y evaluados servirá para reducir la variabilidad en ellos.
- Implantación de rutas asistenciales.
- Mayor conocimiento mutuo interniveles.
- Formación, reciclaje, sesiones clínicas de área.
- Mejor adecuación de los circuitos administrativos.
- Incorporación de servicios corporativos y de «prestaciones» como elementos de potenciación.
- Acceso de AP a todas las pruebas diagnósticas.
- Mayor capacidad de gestión:
- Posibilidad de flexibilizar la gestión de recursos humanos.
- Facilidad para la gestión corporativa, asesoramiento y agrupación de compras.
- Mejora en la gestión de los recursos humanos facilitando la movilidad, la formación, desarrollo de las competencias.
- Posibilidad de implantar incentivos de área.
- Agrupación de compras de farmacia, mantenimiento, energía, servicios logísticos...
- Gestión integral por procesos.
Por último, creemos que la Gerencia Única de Área requiere de un «importante esfuerzo en cambios» que, sin duda alguna, aportarán beneficios en agilidad, eficacia y eficiencia en la prestación asistencial. Convirtiéndose en una importante «inversión presente para beneficios futuros» de cara a que la AP resuelva el 80 por 100 de los procesos y el hospital sea su interlocutor y actúe en el 20 por 100 de los procesos restantes, para de esta forma devolver «equilibrio» en la distribución de los recursos al sistema sanitario, todo ello enmarcado en el reconocimiento a la excelencia en gestión.