En su artículo 16, apartado 1, la LPRL nos dice que:
«La acción preventiva en la empresa se planificará por el empresario a partir de una evaluación inicial de los riesgos para la seguridad y la salud de los trabajadores…».
La ley nos señala a la evaluación de riesgos y a la planificación de actividades preventivas como las herramientas fundamentales para afrontar la prevención de los riesgos laborales en la empresa.
Existen distintos métodos para la elaboración de la evaluación de riesgos. Siempre se procura emplear el más adecuado en cada caso, en función de las características de la empresa en cuanto a su proceso productivo, actividad, locales, etc. Al no ser éste un libro específico de prevención de riesgos laborales, no es su objetivo desarrollar en detalle las diferentes técnicas y métodos relacionados con la evaluación de riesgos. Tan sólo se mencionará el fundamento de uno de los métodos más utilizados, propuesto por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, en cuya página web lo puede encontrar completamente expuesto el lector interesado, basado en la estratificación de los riesgos en función de unas determinadas variables.
En la evaluación, el técnico estudia una serie de riesgos laborales presentes en ese puesto de trabajo, determinando la «probabilidad» de que se materialicen en un daño para la salud (alta, media o baja) y la gravedad de las «consecuencias» (leves, moderadas y graves). Según estas dos variables, el riesgo podrá ser trivial, tolerable, moderado, importante o intolerable. Cuando la probabilidad sea alta y las consecuencias graves, el riesgo será intolerable; si la primera es baja y las segundas leves, el riesgo será trivial. Obviamente, cada una de estas calificaciones requerirá unas determinadas actuaciones que pueden ir desde una pequeña modificación en el que sea tolerable, hasta la paralización del trabajo en el intolerable.
La planificación de actividades preventivas derivará de las medidas que se hayan descrito en la evaluación para combatir cada riesgo. En esta planificación se recogerá el compromiso de la empresa en cuanto a las actividades preventivas que afrontará en el periodo de tiempo que se marque (suele ser anual).